Santiago Soria Valentín
TALLA DE LA MADERA
Características
Se trata de una técnica escultórica desarrollada desde la antigüedad con aplicaciones en la arquitectura y artes decorativas. Aunque empezó siendo un arte menor, la época de mayor esplendor de este arte tiene lugar en la edad media, sobre todo en Europa, donde se puso al mismo nivel que la escultura en metal o piedra. La talla en madera consiste en un proceso de desbaste y pulido del trozo de madera hasta darle la forma deseada.
Las herramientas que se utilizan no han cambiado mucho con el paso del tiempo: cinceles, sierras, hoces, hachas grandes o pequeñas, cepillos y lijas de diferentes grosores. El artista aprovecha en ocasiones las características propias de la madera como las vetas, la policromía, las fibras o la combinación de varios tipos de madera.
Sin embargo, no todos los tipos de madera son convenientes para la talla tras el proceso de curado y secado. Las más apreciadas son las maderas duras: roble, fresno, robina, haya, nogal, olmo, arce, castaño, etc. Las maderas de tipo resinoso son menos aptas para trabajos artesanos: abeto, pino, alerce, ciprés o tejo. Suelen seleccionarse maderas de alta densidad y que se astillen fácilmente.
Usos
La talla en madera tiene diversas aplicaciones pero por lo general, son decorativas y ornamentales. El mayor desarrollo se produce en su aplicación a tipologías religiosas: como en la imaginería cristiana en relieves y esculturas en madera. También se usa en la ornamentación arquitectónica y para decorar mobiliario cotidiano.
En la arquitectura, el tallado en madera es muy utilizado para decorar cubiertas o vigas de madera. Los motivos decorativos suelen ser geométricos o vegetales. Este tipo de decoración también se utiliza en balaustradas, escaleras, columnas, escudos personalizados, etc. También son frecuentes en la decoración de coros de iglesias importantes, en la ornamentación de portadas o ventanas y en mobiliario cotidiano como sillas, escritorios, trofeos personalizados etc.